A continuación están mis notas, las notas de la evaluación continua de las diferentes aulas (la mía fue el aula 3), mi dedicación de horas semanal, una pequeña valoración personal, mi resumen del texto de referencia y las tres PEC (pruebas de evaluación continua), así como algunos escritos con opiniones personales sobre los contenidos de la asignatura.
La asignatura se debería llamar Sociopsicología del trabajo occidental, ya que está exclusivamente centrada en la manera como nuestra sociedad percibe el trabajo.
En general, cualquier asignatura que te entrega una prueba de evaluación y ni se molestan en poner el logo de la uni actualizado (que hace ya muchos años que se cambió) me causa mala impresión.
Tampoco se entiende que nos den unos apuntes con datos del paro referentes al 2013. Entiendo un par de años de retraso, pero no 8. De hecho, algunas de las reflexiones que hacen con esos datos ya no son vigentes o se han demostrado totalmente falsas. No cuestiono que una opinión sea errónea, sino que pase una década y se siga reproduciendo, máxime cuando los alumnos han pagado cientos de euros para cursar esta asignatura. Lamentable. Estos detalles son los que alejan a la UOC de la excelencia, y no la insistencia inquisitoria de la profesora por controlar los supuestos "sexismos" en el lenguaje de los alumnos. En mi opinión, escribir "todes" no nos hace necesariamente excelentes; analizar la evolución del paro en el 2013-2020 y desmentir algunas de las ideas que teníamos tras la gran crisis, sí.
El sistema de evaluación es penoso. No hay ningún tipo de devolución de manera que no sabes en qué puedes mejorar. De hecho, al final de la asignatura me dieron la nota numérica (9) y ni tan siquiera supe por qué ni qué tenía que haber mejorado a lo largo de las PECs.
En los escritos que publiqué en los foros podréis leer mis cuestionamientos a los contenidos de la asignatura, que eran sesgados y parciales. Especialmente triste es el fanatismo de la UOC con Manuel Castells, que les impide ver que sus teorías son flojas, anacrónicas y bastante irrelevantes. Son utopías filotecnológicas que no se corresponden con el sentir actual, que es mucho más distópico y receloso de las tecnologías. Por supuesto, la profesora ni comentó, ni matizó, ni cuestionó ninguna de mis aportaciones. Como el que oye llover. Esto, por cierto, también aleja a la UOC de la excelencia, ya que lo que nos hace mejores no es escribir PECs, sino pensar, compartir, recibir feedback y matizar nuestras opiniones. Imposible con profesores así.
Por todo ello, mi conclusión es clara: esta asignatura aporta muy poco. Por suerte, la carga lectiva es razonable. Los textos son concisos y las PEC no son abusivas, así que el trámite se hace llevadero. A esta asignatura noto que le falta un profesor que se la tome con ilusión, la renueve, se implique con las reflexiones de los alumnos. Hasta entonces da la sensación de puro trámite, tanto para los profesores como para los estudiantes. Es decir, un paso más lejos de la excelencia para la UOC, un lastre para su calidad docente.